El 20 de marzo de 2013, tras años buscando el nombre perfecto entre, la fabricación y la energía que le transmitiríamos a las piezas nace “Salada”. 

Nace con el invento de las pulseras LEASH que son pulseras hechas con amarraderas  (invento) de surf recicladas.

Este nombre sale por la importancia que le doy a todo lo relacionado con el mar. Soy joyero surfista,  o mejor dicho enamorado del mar, todo lo que le rodea y como no de la fantástica madre tierra.

Salada es más que una marca de joyería, es un tributo a la esencia del océano, la naturaleza salvaje y la cultura surf de Fuerteventura. Inspirada en la brisa marina, las olas infinitas y la libertad que solo el mar puede ofrecer, cada pieza de Salada captura la magia de este paraíso atlántico en diseños únicos, frescos y atemporales.

Nacida de la pasión por el mar y el arte de la orfebrería, la marca se distingue por sus piezas hechas a mano en plata de ley, combinando elementos naturales y símbolos icónicos de la isla: olas, caracolas, tortugas, espinas de pescado, tablas de surf y más. Cada joya cuenta una historia, evocando la energía de Fuerteventura y su estilo de vida relajado y aventurero.

Desde anillos y collares hasta pulseras y pendientes, Salada es una firma para quienes sienten el llamado del océano y buscan llevar un pedacito de su espíritu consigo. Joyería con alma salada, creada para los que viven, sueñan y respiran el mar. 🌊💙​

Creo que Salada, está muy cargada de mar y todo lo que conlleva el agua salada para los beneficios que tiene para la salud. Así que les beneficiará en todos los sentidos.

Todas nuestras piezas están realizadas 100 % artesanalmente, transmitiéndoles el cariño y amor que le damos a nuestro trabajo.